marzo 8, 2025

Gifted and Talent

Fundación Altas Capacidades El Salvador

¿Cómo iniciar el año escolar con un niño neurodivergente?

5 minutos de lectura
El inicio del año escolar puede ser desafiante para niños neurodivergentes, pero con estrategias prácticas y apoyo adecuado, es posible facilitar su adaptación. Desde identificar señales de desmotivación en niños con altas capacidades hasta usar herramientas visuales para apoyar a niños con autismo o crear rutinas claras para quienes tienen TDAH, cada estrategia debe ser personalizada. Además, el acompañamiento de un profesional que diseñe directrices curriculares ajustadas a sus necesidades es clave para garantizar una experiencia escolar inclusiva y enriquecedora.

La neurodivergencia es un término que se utiliza para referirse a personas con una condición neurobiológica diferente a lo que se considera “típico”. Esto significa que los niños neurodivergentes tienen características en su desarrollo neurológico que los hacen aprender, razonar y socializar de manera distinta. En El Salvador, estos niños están contemplados dentro de la Ley Crecer Juntos, siendo reconocidos como niños con necesidades específicas de apoyo educativo. Entre ellos se incluyen aquellos con altas capacidades intelectuales, autismo, déficit de atención, doble excepcionalidad, y dificultades de aprendizaje como dislexia o discalculia.

El inicio del año escolar puede representar un desafío significativo para estos niños, ya que su condición puede requerir un entorno inclusivo que los comprenda y apoye. Factores como el ruido, los cambios de rutina, la hipersensibilidad emocional o sensorial, y experiencias previas negativas como el acoso escolar o etiquetas despectivas (“niño problemático”, “inquieto”, “hablantín”) pueden dificultar su adaptación. Es esencial que los padres implementen estrategias prácticas para facilitar esta transición desde los primeros días.

Consejos prácticos para un buen inicio escolar

  1. Tener un diagnóstico claro
    Es fundamental contar con una evaluación de un especialista que confirme la condición del niño. Los padres deben estar informados sobre las necesidades específicas de su hijo y compartir esta información con la maestra. A veces, por miedo a las etiquetas, los padres no entregan el diagnóstico, perdiendo la oportunidad de que los docentes adapten las estrategias de enseñanza y apoyo necesarias. Es importante entender que un diagnóstico no es una etiqueta, sino una herramienta para mejorar la atención educativa.
  2. Preparar materiales y rutinas con antelación
    Es necesario que los padres establezcan rutinas previas al inicio del ciclo escolar. Esto incluye simulacros de las actividades diarias, como preparar útiles escolares, organizar mochilas y familiarizarse con el horario escolar. También se recomienda evitar comentarios negativos sobre el regreso a clases, como: “Se acabaron las vacaciones, ahora vienen los madrugones” o “A ver cómo le va con esa maestra tan estricta”. Estas frases pueden generar ansiedad o fobias en el niño además los niños neurodivergentes por lo general lo perciben de forma literal.
  3. Reestablecer horarios gradualmente
    Después de las vacaciones, es útil comenzar a ajustar los horarios poco a poco. Por ejemplo, durante la primera semana, adelantar la hora de levantarse en casa gradualmente, hasta llegar al horario habitual de la jornada escolar. Crear un horario visual con imágenes puede ayudar al niño a entender y anticipar lo que ocurrirá durante el día, facilitando su adaptación.
  4. Organizar y familiarizarse con los útiles escolares
    Muchos niños neurodivergentes tienden a perder materiales escolares. Una solución práctica es tomar fotos de todos los útiles y hacer un pequeño cuaderno o folleto con estas imágenes. Esto permitirá al niño revisar al final de la jornada si lleva consigo todo lo que trajo al colegio.
  5. Coordinar con la maestra
    Hablar con la maestra es clave para explicar las necesidades específicas del niño y definir estrategias que puedan ser útiles. Por ejemplo, el uso de audífonos para evitar sobrecarga sensorial, juguetes antiestrés o una “botella de la calma” para gestionar emociones, o materiales extra para niños con altas capacidades.

Algunas recomendaciones en situaciones específicos son:

Niños con Altas Capacidades:
Situación: Si observas que tu hijo inicia el año escolar entusiasmado pero a los pocos días muestra desmotivación, investiga si las actividades escolares son demasiado repetitivas o poco desafiantes.
Ejemplo: Proporciona material adicional relacionado con los temas que le interesan. Por ejemplo, si está aprendiendo fracciones en matemáticas, explícale cómo se aplican en la cocina o en divisiones complejas, como repartir objetos entre diferentes grupos.

Niños con Autismo:
Situación: Si tu hijo tiene dificultades para expresar con palabras lo que siente o lo que está sucediendo, utiliza herramientas visuales que le ayuden a identificar y comunicar situaciones.
Ejemplo: Crea tarjetas con dibujos de situaciones escolares: un niño empujando a otro (incorrecto) y un niño ayudando a otro (correcto). Enséñale a señalar cuál corresponde si algo similar ocurre en el colegio y explícale cómo buscar ayuda de un adulto.

Niños con Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH):
Situación: Si notas que tu hijo tiene problemas para organizarse al inicio del año, establece rutinas claras y utiliza recordatorios visuales.
Ejemplo: Coloca una lista de tareas en su mochila con pasos básicos, como “Revisar cuadernos”, “Empacar útiles”, y “Guardar libros en su lugar”. También puedes usar colores para codificar materias (libros verdes para ciencias, rojos para matemáticas).

Niños con Problemas de Integración Sensorial:
Situación: Si tu hijo es sensible a ruidos fuertes, luces intensas o texturas, coordina con la maestra para realizar adaptaciones en el aula.
Ejemplo: Proporciona audífonos con cancelación de ruido para que los utilice durante actividades ruidosas o asegúrate de que tenga un espacio tranquilo donde pueda regularse cuando lo necesite.

Niños con Dificultades de Aprendizaje (Dislexia, Discalculia, etc.):
Situación: Si notas que tu hijo está frustrado porque no logra seguir el ritmo de los demás, trabaja en casa reforzando habilidades de manera creativa.
Ejemplo: Si tiene dislexia, utiliza audiolibros para que pueda seguir las lecturas escolares y explícale la importancia de los descansos entre actividades para no sentirse abrumado.

Recuerda busca el Acompañamiento de un Buen Profesional especialista en la neurodivergencia que tiene tu hijo:
Es fundamental trabajar con un especialista que pueda extender constancias y directrices curriculares personalizadas que se ajusten a las necesidades de tu hijo y orienten tanto a la escuela como a la familia.
Un profesional puede sugerir adaptaciones como la reducción de tareas repetitivas para niños con altas capacidades o pausas sensoriales para aquellos con problemas de integración sensorial, asegurando que el aprendizaje sea efectivo y accesible.

Estos consejos no solo ayudan a que los niños neurodivergentes tengan un mejor inicio de año escolar, sino que también promueven su bienestar emocional y su capacidad de aprender y socializar en un entorno que respete sus necesidades únicas. Una buena preparación y comunicación entre padres, maestros y el niño garantizará un año lectivo más exitoso y feliz.

Altas Capacidades El Salvador
Evelyn Campos

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